miércoles, 2 de mayo de 2012

Comunidad de lectura

Click aquí Comunidad de lectura de Literatura Argentina 
Retomamos la Comunidad de lectura de literatura argentina. Esta vez con dos modalidades entre las cuales podés elegir el recorrido que más te guste:

Modalidad libre: ingresá al blog http://www.tallerelplacerrebelde.blogspot.com/ donde iremos co-creando contenidos relacionados con nuestras lecturas, organizadas según ejes temáticos, problemáticas estéticas, genéricas, lingüísticas, etc. Podés compartir lecturas, comentarios, enlaces, etc.

Modalidad provocada: lecturas, desafíos, intercambios y debates con un grupo de estudio de literatura argentina en el aula virtual www.abir.org.ar/dokeos . Enviá un mail a tallerelplacerrebelde@gmail.com con tus datos (nombre, apellido, lugar, relación con la literatura) para inscribirte, recibir tu usuario y contraseña y colaborar con la compra de materiales abonando $100 por única vez. El aula virtual brinda: Foro/ Recursos para escritores/ Carga y descarga de libros/ Acceso a enlaces.

Más info: http://www.biblioculturapermanente.blogspot.com/ , Biblio Santiago Coronel 0358-4652385, José Semería 850 (Río Cuarto)

Participan: ABiR (Asociación de Bibliotecas de Río Cuarto), Biblioteca Popular "Santiago Coronel", Puntobiblio.com

Entrevista en Diario Puntal

Puntal 30/04/2012 - adaptarse a un nuevo contexto
Las bibliotecas populares promueven la lectura usando las nuevas tecnologías
En la ciudad y la región hay 13 espacios sostenidos por vecinos que trabajan para mantener viva la cultura del libro. Para ello, hicieron un catálogo en la web, ofrecen computadoras y wi fi al público e incorporarán pasantías con secundarios, además de los talleres que día a día realizan en los barrios En Río Cuarto y la región existen 13 bibliotecas populares, algunas de ellas centenarias. A pesar de los cambios ocurridos en las últimas décadas, estos espacios sostenidos por grupos de vecinos se mantienen como un refugio para la lectura y como un ámbito abierto al arte y la cultura en cada barrio. Desde la Asociación de Bibliotecas de Río Cuarto (Abir), organización que ya lleva 10 años de existencia, relataron algunos de los diferentes proyectos que se realizan para acercar el libro a viejas y nuevas generaciones y el modo en que usan las nuevas tecnologías para lograrlo. Los integrantes de las bibliotecas populares de la ciudad trabajan diariamente para defender y promover el placer de descubrir nuevos mundos a partir de la lectura. Para ello, incorporan la tecnología como una herramienta que puede complementar y potenciar el libro a través de distintos proyectos. En ese marco, desarrollaron un catálogo en la web que pone a disposición de la ciudadanía miles de libros presentes en diferentes bibliotecas de la ciudad. A su vez, incorporaron la consulta en internet como un servicio más que complementa los contenidos en papel y articulan con escuelas para difundir el material que poseen en el ciberespacio. A partir de proyectos como éstos, las bibliotecas populares niegan cotidianamente aquel vaticinio que consideraba a las nuevas tecnologías como el certificado de defunción de la lectura en papel. “Van a pasar muchos siglos hasta que el libro sea reemplazado”, dice el presidente de Abir, Miguel Bueno, citando al filósofo italiano Umberto Eco. Con estas certezas bajo el brazo, este año las bibliotecas de la ciudad realizarán pasantías con estudiantes secundarios y su personal se capacitará cursando la carrera de bibliotecología, ya que la falta de formación en este ámbito es una de las problemáticas que enfrentan. Estas actividades se suman a los talleres y eventos culturales que las instituciones realizan cotidianamente para niños, jóvenes y adultos. “Para el bibliotecario, que venga la gente es un desafío diario”, relató Liliana Jara, encargada de la Biblioteca Popular Santiago Coronel de Alto Privado Norte. Y destacó el modo en que distintos proyectos y su articulación con las instituciones educativas permiten derpertar en el barrio el interés por la lectura. Desde Abir señalaron que incorporar libros actualizados a las bibliotecas es otro de los desafíos que se proponen; es por ello que varios de sus integrantes viajarán en los próximos días a la Feria del Libro de Buenos Aires, donde adquirirán material nuevo y a bajo costo gracias a un subsidio de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip). Catálogo en la web Luego de cuatro años de trabajo, Abir culminará en el próximo mes el proyecto Biblio Redes. El mismo consistió en crear un catálogo en el que la ciudadanía podrá consultar en la web los libros disponibles en distintas bibliotecas populares de Río Cuarto. Así, nuestra ciudad será una de las primeras en el país que contará con este sistema de consulta en red. El proceso consistió en “crear una base de datos digitalizada en un software especial donde tener una catalogación y una clasificación de los libros que teníamos en todas las bibliotecas que participaron del proyecto, que éramos seis: Sarmiento, Segat, Sagrado Corazón, Santiago Coronel, Ambrosio Olmos y Mariano Moreno”, indicó el presidente de la asociación. El resultado estará disponible próximamente para los habitantes de Río Cuarto y de distintas partes del mundo en la página www.abir.org.ar. “Así garantizamos una distribución masiva de la información porque desde cualquier máquina se puede entrar al catálogo colectivo, buscar el libro que querés y ver en qué biblioteca está”, expresaron desde Abir. Y se refirieron al alcance que ya está adquiriendo el proyecto: “Han ingresado desde España y nos quieren mandar libros desde allá, también tenemos consultas de Estados Unidos”. Bueno explicó que en un principio la intención era incluir en la lista alrededor de 100 mil libros, que es la cantidad que suman las seis bibliotecas. Sin embargo, por falta de tiempo y dinero, hasta el momento se incorporó aproximadamente la mitad del material disponible. “Los libros que están catalogados son los que más se están solicitando y usando”, aclaró y ejemplificó que la biblioteca Santiago Coronel ya lleva alrededor de 5.000 mil libros digitalizados. “Esta es una tarea que no termina nunca”, añadió en relación a la continua incorporación de libros en estos espacios por compras o donaciones. ¿Papel o digital? Desde Abir intentan desplazar la disyuntiva entre el soporte papel y el soporte digital, buscando un complemento entre ambos. Así, además del proyecto mencionado, las bibliotecas de la ciudad buscan incorporar las nuevas tecnologías en su actividad diaria, promoviendo el acceso a las mismas por parte de los vecinos y usándolas como herramientas para la promoción de la lectura. En este sentido, Bueno explicó que muchas de las bibliotecas poseen computadoras y wi fi gratis para el público e incluso algunas de ellas brindan talleres de computación. “Tenemos como eje de trabajo tratar de achicar la brecha digital”, dijo. Y explicó que a partir del programa Conectar Igualdad muchos hogares poseen netbooks pero no tienen internet, por lo que estos espacios comunitarios les posibilitan a muchos riocuartenses el acceso gratuito a la Web llevando sus propias computadoras. “Ahora queda todavía una brecha de gente que está fuera del programa de la Nación porque no está escolarizada y no tiene la netbook como herramienta; estamos viendo cómo llegar a ese sector con la tecnología”, indicó el presidente de la asociación. A su vez, Jara destacó que también se busca acercar el soporte papel al digital, intentando que no exista una división tajante entre ambos. “Cuando vienen por una consulta escolar lo primero que se hace es ir a referencias, buscar en el libro y si hubiera que ampliar la información recién ahí se busca en la computadora: primero en el Encarta, en algún cd -porque hay muchos libros que traen soporte digital- y después en internet”, describió en relación al proceso que se da en la biblioteca Santiago Coronel. Además, desde este espacio comenzaron a desarrollar un proyecto innovador con los alumnos de segundo año de un Ipem para articular el uso de las netbooks en distintas materias de la escuela con el trabajo de la asociación y el material que ésta posee. “Los chicos van a venir con su eje de trabajo, que serán por ejemplo las novelas en el área de literatura, y lo que van a hacer es ayudarnos a nosotros en la página web y el blog que tenemos haciendo reseñas literarias, videos de stopmotion promocionando libros”, describió la bibliotecaria. Y agregó que con este proyecto se “busca que la tecnología sea una herramienta más, que no implique elegir el soporte papel o el soporte digital sino que se puedan conjugar ambos y armar algo interesante promocionando el libro y el placer por la lectura”. Capacitación La capacitación es el principal eje de trabajo que se plantean desde Abir para este año. Ante la escasa difusión de la carrera de bibliotecología, el personal que actualmente trabaja en las bibliotecas de la ciudad se formará a distancia en esta profesión. Además, estudiantes secundarios realizarán pasantías para aprender y conocer más de cerca el trabajo de acercar los libros a la gente. “Hay un déficit en las bibliotecas de Río Cuarto porque no hay personal calificado, no hay bibliotecarios en la provincia y el país, es un rubro que quedó muy débil porque no es un cargo muy reconocido”, dijo Bueno al respecto y añadió que son pocos los colegios que aún mantienen este puesto. “También hay un imaginario social que hay que romper de cuál es el rol del bibliotecario; se piensa que solamente vas a estudiar qué libro poner en cada lugar y en realidad es algo mucho más amplio pero ese imaginario tampoco ayuda a que se desarrolle como profesión”, manifestó Jara. Ahora, a partir de un proyecto presentado por Abir a la Municipalidad, cinco trabajadores de las bibliotecas de la ciudad están cursando a distancia la carrera de bibliotecología en la Universidad de La Plata. De cualquier modo, señalaron que el gobierno local sólo les otorga un subsidio de $500 que no es suficiente para solventar los viajes. Por otro lado, este año las bibliotecas locales abrieron una convocatoria para que estudiantes secundarios de cuarto, quinto y sexto año puedan realizar pasantías en esas instituciones. Bueno señaló que ya se habían desarrollado experiencias con chicos del nivel medio, terciario y superior pero aclaró que ahora Abir lanzó un proyecto para que estas prácticas se amplíen y sistematicen. “Es una pasantía formativa, que tiene que ver con lo cultura porque cada biblioteca tiene una realidad cultural diferente; la idea es que el alumno conozca a la gente que hay que atender y las necesidades sociales, que son cosas que los chicos van a poder ver en concreto. Incluso algunos pueden entusiasmarse y seguir una carrera”, comentó. A través de esta propuesta, a partir de septiembre de este año los estudiantes podrán trabajar durante un mes en alguna de las bibliotecas de la ciudad, aprendiendo las distintas tareas que allí se realizan. Desde Abir informaron que ya se abrieron las convocatorias para las instituciones educativas y destacaron que ya hay varias escuelas interesadas en participar, por lo que se estableció un cupo de alumnos y colegios para cada biblioteca. Mucho más que libros “Las bibliotecas son mucho más que libros”, subrayan desde la asociación local, haciendo hincapié en la tarea cultural y educativa que realizan diariamente. En ese sentido, consideran que el desarrollo de proyectos, eventos y talleres con los vecinos es un importante aporte a la cultura de la ciudad y también una instancia esencial para difundir el placer por la lectura en el contexto actual. “En general estamos conformes con la cantidad de gente que viene a consultar a las bibliotecas pero nosotros aspiramos a que vengan muchos más”, dijo el presidente de la asociación. Y agregó que para lograrlo cada asociación desarrolla estrategias que acerquen y orienten a la población en el mundo de los libros, ya que de lo contrario “las bibliotecas nunca van a ser masivas”. Más allá de sus similitudes, cada espacio le da una impronta propia a ese objetivo. La asociación ubicada en Alto Privado Norte, por ejemplo, está orientada principalmente a la formación de grupos sociales, el trabajo voluntario y la discusión política, y cuenta con material interesante al respecto, como las obras completas de Eduardo Galeano, Paulo Freire y Michel Foucault. Para difundir esas temáticas y el uso de estos libros llevan adelante distintos proyectos con los vecinos. “Para el bibliotecario es un desafío diario que la gente asista”, relató al respecto la bibliotecaria del lugar. Y añadió que continuamente se desarrollan actividades para que los vecinos se informen, se acerquen y participen en el espacio. “Trabajamos mucho con el jardín maternal, por ejemplo, y muchos de esos chicos, que reciben la promoción de la lectura a través de distintas actividades, son los que después cuando tienen 5 o 6 años ya vienen solos a elegir un libro”, contó Jara. A su vez, la mayoría de estas asociaciones realiza un importante trabajo cultural a través de distintos talleres y eventos artísticos. Destacando el valioso aporte que las bibliotecas populares significan para nuestra ciudad, los integrantes de Abir concluyeron: “No hay otras instituciones a nivel municipal que estén abiertas al público en general sin ningún condicionamiento social, ideológico ni religioso. Y algunas ya tienen más de 100 años de historia en Río Cuarto”. Riocuartenses en la Feria del Libro de Buenos Aires La mayoría de las bibliotecas que integran Abir viajarán en los próximos días por quinto año consecutivo a la Feria del Libro de Buenos Aires. Allí, gracias a un convenio con la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (Conabip) podrán obtener cientos de libros a mitad de precio para luego ofrecerlos a los riocuartenses. Los integrantes de la asociación relataron que participar de este gran evento cultural es “una pasión” para los bibliotecarios y una oportunidad para acceder a diverso material a bajo costo. “Nos dan un subsidio para viajar y comprar por un monto mínimo y también compramos con plata de la biblioteca. Podemos comprar al 50% del valor de tapa cualquier libro en alrededor del 80% de los stands que hay”, relató Miguel Bueno, presidente de Abir. Y señaló que para aprovechar al máximo la visita cada biblioteca define ciertos criterios de compra en base a la orientación del espacio y las necesidades de su público. En relación a esto, Bueno ejemplificó: “La primera compra que se hizo en la feria se basó en una cuestión más ideológica; se trató de recuperar en todas las bibliotecas los libros que habían quemado los militares en Río Cuarto porque era un material valioso que se había perdido”.
Lucía Maina
Fuente: http://www.puntal.com.ar/noticia_ed_anteriores.php?id=124947